La psicomotricidad fina son aquellos movimientos del cuerpo que requieren una mayor destreza y habilidad, un mayor dominio de los movimientos, especialmente de manos y brazos. Y estos ejercicios son imprescindibles para comenzar a dominar la escritura por ejemplo.
En La Casita del Reloj nos encanta realizar trabajos manuales que, por un lado, despiertan la creatividad y el lado más artístico de los pequeñ@s y, por otro, les ayuda a ejercitar esa psicomotricidad fiina con ejercicios como pintar con esponja y rasgar y pegar papeles. Los niñ@s disfrutan de los lindo y sin darse cuenta trabajan estos aspectos tan importantes para su desarrollo. Y como estamos en otoño qué mejor que ponernos a crear preciosas manualidades sobre esta temática?
¿habéis visto qué aplicados y concentrados están?