¿Cómo afectan a los niños los cuentos? ¿Son realmente buenos para ellos y les transmiten buenos valores o por el contrario pueden incluso traumatizarles el contenido y provocarles problemas emocionales? ¿El final feliz siempre es una buena opción?
LOS CUENTOS INFANTILES AYUDAN A DESARROLLAR LA IMAGINACIÓN
De hecho, muchos de ellos les pueden guiar en el entendimiento de los dilemas emocionales. Los niños pequeños aún no saben diferenciar la fantasía de la realidad y las historias inventadas les ayudan a desarrollar su lado más imaginativo y creativo. Si a los niños solo les contáramos historias reales no aprenderían a diferenciar lo que es fantástico de lo que es real. Los cuentos les abren esa puerta a adentrarse en un mundo mágico… conforme vayan creciendo se irán dando cuenta que los gatos no hablan y que las calabazas no se convierten en carroza y que los dragones no existen.
¿EN QUÉ AYUDAN LOS CUENTOS?
Los cuentos ayudan a los niños a entender las peculiaridades y debilidades de la conducta humana. Los cuentos también les aportan tranquilidad ya que muchas veces explican como a pesar de la maldad y de las dificultades se puede encontrar la bondad y la generosidad. La preocupación existe en algunos padres por los mensajes que se ofrecen en algunos cuentos tradicionales respecto al papel de las niñas.
Ellas son las que deben son salvadas por los niños, las que son capturadas y las que no son capaces de salvarse por sí mismas. En estos cuentos el objetivo de la chica es poder ser salvada para casarse con el príncipe y entonces vivir feliz y comer perdiz. Estas historias pueden llevar a las niñas a situaciones de dependencia e inseguridad y a los niños a esa presión de tener que ser el héroe. Además, el ideal de ser «princesa» o «héroe» puede llevar a los pequeños a no tener un buen concepto de ellos mismos si no cumplen con los estereotipos marcados por los cuentos y esto es peligroso ya que pueden vetar la personalidad de cada uno.
Estos valores obsoletos afortunadamente cada vez tienen menos peso en la literatura infantil, y si bien existen aún en la literatura tradicional, es deber de los padres explicarles a los pequeños los valores correctos.
Es muy importante potenciar a los niños el hábito lector y si les gusta leer cuentos, no existe mejor manera de hacerlo. Los cuentos, siempre que estén adaptados al nivel de entendimiento de los pequeños, serán una buena opción.